La tecnología está abarcando muchos más espacios en el mundo, siendo así además de un producto y servicio, un apoyo a muchas industrias y áreas comerciales del mercado, incluso reemplazando a personas que realizan algunos oficios en la actualidad.
Dichos cambios han existido desde hace muchos años. Profesiones de la antigüedad han dejado de existir por ser reemplazadas con las máquinas, y seguramente, muchas otras dejarán de ser desempeñadas por seres humanos al presentarse robots cada vez más eficientes, rápidos e inteligentes.
Un ejemplo de ello, son los robots camareros que se encuentran alrededor del mundo. Estos en particular, se pueden encontrar en Qatar o Madrid. Se encargarán de llevar la comida a las mesas de los clientes, y cuenta con sensores especiales que permiten realizar un correcto desempeño de su tarea moviéndose sin dificultad por el lugar.
Este tipo de tecnologías arrancó inicialmente en Asia, y con la gran popularidad que han obtenido y su excelente desempeño, se van incorporando en otros países de diferentes continentes.
Cada vez más son los restaurantes que se encuentran adecuados a este tipo de conceptos, en donde la tecnología, la excelencia culinaria y los espacios agradables y cálidos de todo restaurante, convergen con el fin de brindar una excelente experiencia.
Por ejemplo, existe el robot camarero Theresa, el cual es el primero en Europa y en el reino unido, y su funcionamiento se puede ver gracias a ynuk.tv. Una vez seleccionado el número de mesa y el plato, se encargará de cumplir los deseos de cada comensal sin ningún problema.
Asimismo, podemos observar el primer robot camarero en Dubai en los espacios de “Drink and Spice Magics Restaurant”, el cual se adecúa al concepto de las instalaciones, con la vestimenta del resto del personal y las necesidades de rapidez y atención que cualquier cliente necesita.
Sin embargo, existen ciertas preocupaciones para las personas que cumplen las labores de camareros, quienes piensan que en cualquier momento podrían ser reemplazados por las máquinas. Para mitigar estas posibilidades, sería conveniente adquirir conocimientos y formaciones en otros ámbitos que los robots no pueden cumplir, convirtiéndose así en un recurso valioso e irremplazable. Trabajar en la cocina podría ser una buena propuesta, que permite demorar el hecho de ser reemplazado por un robot, pero seguramente si estás en esta situación lo mejor sería buscar la forma de reinventarte en algún otro puesto de trabajo o aprender un oficio con menos amenaza de automatización.
